En River, se acerca Fabbro y se aleja Teo Gutiérrez

El volante confía en arreglar sus problemas con Cerro Porteño, mientras que el Cruz Azul rechazó otra oferta por el colombiano. 

Ramón Díaz está ansioso. Mientras comanda la pretemporada de su equipo en Salta, espera por refuerzos. Quiere pelear el campeonato, sabe que River tiene una buena oportunidad de volver a dar una vuelta. Eso sí, necesita buenos nuevos valores. Por eso, la dirigencia está trabajando para "complacer" al riojano. Hasta ahora, los resultados no han sido los mejores, pero eso podría cambiar.

Mañana por la tarde, Carlos Carbonero, el ex volante de Arsenal, estaría incorporándose a la pretemporada que el plantel Millonario realiza en la provincia norteña. No existirían motivos para que esa operación se trunque, pero en un mercado de pases como el que se está desarrollando durante este invierno, todo es posible.

Con respecto a la situación de Jonathan Fabbro, la cuestión parecía resuelta horas atrás. River y Cerro Porteño se pusieron de acuerdo en cuanto a la negociación; sucede que el club paraguayo debe saldar una deuda que tiene con el volantepara destrabar el pase, definitivamente. "Hay una deuda de por medio, sumado a los papeles. Es por eso que uno no quiere irse corriendo, aunque entre hoy o mañana ya voy a tener seguramente todo cerrado, dijo Fabbro. "Las cosas no dependen de nosotros. Hicimos todo lo posible para salir del club. Hace muchísimo tiempo que mi hermano (Darío) estaba con las negociaciones", agregó. Las próximas horas serán cruciales. 

La operación que parece enfriarse un poco, a pesar de los esfuerzos de la institución de Nuñez, es la que involucra a Teófilo Gutiérrez. Ya que hoy, luego de rechazar la primera oferta (de 2.100.000 dólares), el Cruz Azul volvió a volcarse por la negativa ante una nueva propuesta de River, que alcanzó los tres millones. "La contraoferta no es la adecuada. Venderlo sería una buena opción, el tema es el cliente y al precio justo", manifestó el gerente deportivo de los Cementeros, Agustín Manzo. Los mexicanos no se van a bajar del precio original: cuatro millones de dólares. 

El 1 de agosto cierra el libro de pases en nuestro país. Ramón espera contar, antes de que eso ocurra, con un plantel fuerte e incorporaciones de peso. Por ahora, deberá seguir comiéndose las uñas.